Dieta Mediterránea

Grasa y aceite

La grasa y el aceite

Ya que el aceite de oliva era, y todavÍa es, la grasa que históricamente atiende buena parte de las necesidades de la población de la cuenca mediterránea y, dado su reconocimiento como alimento diario en la dieta de estos pueblos, nada más natural que centenas de trabajos científicos tengan al aceite de oliva como objeto de estudio.
 
Los científicos, profesionales y estudiantes de medicina, nutrición, química y otras disciplinas se orientaron de tal forma al estudio del aceite de oliva que, cada año surgen nuevos trabajos, a cada trabajo se comprueba más y más sus beneficios. Los mismos beneficios que nuestros antepasados de la antigüedad llevaron siglos para descubrir, probar y hacerlos conocidos en el viejo mundo, hoy están siendo probados y comprobados en laboratorios.

Basado en diversos estudios científicos, está comprobado que nuestro cuerpo necesita agua, proteínas, lípidos y carbohidratos - los llamados macronutrientes, además de vitaminas y minerales - los micronutrientes. Algunos estudios indican que la dieta también requiere etanol (que puede ser ingerido, por ejemplo, en la forma de algún tipo de bebida alcohólica). Las vitaminas y minerales actúan esencialmente como controladores de los procesos metabólicos - los procesos de transformación que ocurren en el organismo. Los lípidos, por su vez, son sustancias oleosas no grasosas que actúan como fuente de energía para impulsar estos procesos, tanto en la formación de las membranas celulares, de los tejidos del sistema nervoso, de los tejidos del cerebro y de los neurotransmisores, como también en el transporte de las vitaminas solubles en grasa a las células. Por lo tanto necesitamos, en promedio, una dosis diaria de aproximadamente 25 ml de grasa. Esta grasa puede venir del propio exceso acumulado en el organismo (razón por la cual los médicos piden para disminuir la grasa a ser ingerida), o puede venir de fuentes externas - la dieta. Sin embargo, es bueno recordar, que la grasa está presente en la preparación de casi todos los alimentos que ingerimos, es decir, ya que raramente tenemos condiciones de escapar de la grasa, necesitamos tener más conocimiento sobre las grasas y saber escoger y dosificar el tipo más adecuado para nuestro organismo.

Las grasas son partes integrantes de los lípidos. Y los lípidos se dividen en dos tipos: los derivados y los no derivados del glicerol. Los derivados pueden ser simples o compuestos y dentro de los simples están los aceites y las grasas. Por otro lado, los lípidos no derivados del glicerol son compuestos de esteroides, uno de ellos es el famoso colesterol. Para no ir más lejos de lo que nos interesa, vamos a parar en dos de estos componentes - las grasas y el colesterol.